... Y no precisamente las de los perros.
Algo que nunca me ha gustado del D.F. es que hay mucho de todo y es hasta que te ves inmerso en el caos de la gran ciudad que te das cuenta de eso. Colas para la comida, para el cine, para tomar un taxi/camión, en el metro, en los bares, en el Oxxo, en la señora de las gorditas, donde vayan seguramente tendran que hacer fila para obtener algun bien o servicio.
Y si bien alguna vez dije que no me gustaría vivir en el DF debido a la abundancia de todo (bueno como restaurantes, bares, etc. y malo como la contaminación, gente, tráfico, etc.) creo que después de 6 meses viviendo por acá uno le va agarrando el gusto.
Saludos y pásenla bien